Quito, 9 ene (EFE).- El Servicio Nacional de Atención Integral a Personas Adultas Privadas de la Libertad y a Adolescentes Infractores (SNAI) confirmó este martes la fuga de Fabricio Colón Pico, capturado luego de que la fiscal general del Estado, Diana Salazar, denunciara un presunto plan para atentar en su contra.
En SNAI indicó en un comunicado que durante la madrugada de este martes hubo “hechos violentos entre personas privadas de la libertad, Policía Nacional y personal penitenciario”.
Tras ese suceso, Colón Pico “evadió los controles junto con otras personas privadas de la libertad”, señaló al agregar que hasta el momento se ha logrado la recaptura de doce reos.
Apuntó que en coordinación con la Policía Nacional y las Fuerzas Armadas se han activado los protocolos de seguridad.
La fuga de Colón Pico se dio mientras rige un estado de excepción, con toque de queda nocturno, decretado por el presidente Daniel Noboa, en momentos en que ocurrían disturbios en unas seis cárceles del país.
Detenido en caso de secuestro
Colón Pico fue detenido la semana pasada en un operativo ejecutado por la Fiscalía y la Policía en el norte de Quito, en el marco de una investigación por el presunto delito de secuestro ocurrido en meses pasados.
En el operativo de su captura encontraron tres vehículos de alta gama (uno blindado), dinero en efectivo y municiones.
El pasado miércoles, Salazar dijo que “grupos de delincuencia organizada estarían planificando un atentado” contra su integridad.
Salazar identificó a Colón Pico, conocido con el alias de “Capitán Pico” y vinculado a una banda criminal llamada ‘Los Lobos’, como quien estaría detrás de un presunto plan para asesinarla.
Según la fiscal, quienes supuestamente intentan acabar con su vida serían los mismos que, en agosto pasado, habrían planearon el asesinato del entonces candidato presidencial Fernando Villavicencio, acribillado al salir de un mitin proselitista en Quito.
“Quieren callarme, como lo hicieron con Fernando Villavicencio, y ahora lo quieren hacer con la fiscal”, dijo tras insistir en que detrás de ese supuesto plan estaría Colón Pico.
“Lo digo con nombre y apellido. Ahora sí, vengan a asesinarme”, desafió Salazar durante una audiencia del denominado caso ‘Metástasis’, que investiga una supuesta trama de corrupción en el sistema judicial, carcelario y policial por presunta infiltración y sobornos del narcotráfico.
Tras esa detención, el presidente Noboa dispuso el traslado de tres cabecillas de ‘Los Lobos’ a una de las cárceles de máxima seguridad del país, y reforzó el anillo de seguridad de Salazar y su familia, pero el lunes iniciaron los disturbios en las cárceles.
Estado de excepción
Noboa decretó el lunes el estado de excepción tras una serie de disturbios en al menos seis cárceles del país, que implicó la retención de guardias penitenciarios y la quema de colchones.
El estado de excepción permitirá la actuación de las Fuerzas Armadas, en apoyo a la Policía, para el control de los centros carcelarios.
Pese a ello, durante la noche y madrugada se registraron una serie de explosiones, secuestro de policías y la fuga de reos.
Desde las cárceles, los reos exigen que no se realicen traslados de presos ni se avance con los controles en los centros penitenciarios, pero el secretario de Comunicación de la Presidencia, Roberto Izurieta, dijo este martes que no cederán en las acciones en los centros de reclusión.
El SNAI ha confirmado la retención de agentes penitenciarios, pero no ha detallado cuántos, en qué cárceles o la condición en que se encuentran.
También la Policía ha informado del secuestro de servidores policiales, pero no han ofrecido, hasta el momento, un balance de la situación a nivel nacional.
Asimismo, el SNAI anunció este lunes que puso una denuncia por la “presunta evasión” del Centro de Rehabilitación Número 4 de la provincia costera de Guayas del recluso José Adolfo Macías, conocido como ‘Fito‘, considerado uno de los delincuentes más peligrosos del país.
‘Fito’, líder de la banda ‘Los Choneros’, no fue encontrado en su celda el pasado domingo durante una operación de las fuerzas del orden en la cárcel en la que se encontraba recluido.
EFE