Los países nórdicos: Se acaba la política de bienvenida y comienzan las deportaciones (+VIDEO)
Los venezolanos, que han llegado con mucha más fuerza en los últimos meses, sufren las consecuencias de una política migratoria más restrictiva pero que también afecta al resto de nacionalidades.
Según una publicación del periodista venezolano David Placer, los países nórdicos han dejado de ser un paraíso para los solicitantes de asilo de todo el mundo y los migrantes de países en graves conflictos.
Suecia, Noruega, Finlandia, Dinamarca e Islandia están coordinando una política migratoria al margen de la Unión Europea para expulsar y deportar a migrantes irregulares y solicitantes de asilo cuyos casos han sido denegados.
Los venezolanos, que han llegado con mucha más fuerza en los últimos meses, sufren las consecuencias de una política migratoria más restrictiva pero que también afecta al resto de nacionalidades.
Hasta hace pocos meses, los solicitantes de asilo en los países nórdicos recibían ayudas para manutención y vivienda mientras se analizaba su caso y también después de la aprobación de su asilo, pero con la llegada masiva de migrantes de múltiples nacionaldiades, los gobiernos han cerrado el grifo migratorio.
Los cinco gobiernos han acordado reforzar la política de deportaciones y han expulsado en un año a más de 25.000 migrantes. Islandia ha comenzado la deportación de venezolanos y ofrece dinero en efectivo a quienes abandonen el país de forma voluntaria. Suecia y Noruega están enviando a los solicitantes de asilo a pequeñas localidades del Círculo Polar Ártico, donde las condiciones son extremas y algunos han desistido.
Placer conversó con dos venezolanos en Noruega. El primero de ellos, Zonny Paruta, ex comisario policial y ahora asilado en Noruega, explica que los interrogatorios son exhaustivos, pero dice que deberían serlo aún más, ya que algunos venezolanos se han hecho pasar por supuestos exfuncionarios policiales y militares para obtener el asilo. El segundo entrevistado, un militar que ha solicitado mantener su identidad oculta, explica que algunos solicitantes de asilo enviados al norte no aguantan las duras condiciones y se quiebran psicológicamente. Algunos ya han desistido y regresado a Venezuela.
En el país vecino, el nuevo gobierno sueco ahora también restringe la aprobación de permisos de trabajo y sólo las personas con ofertas de empleo con más de 2.400 euros al mes (2.700 coronas suecas) podrán optar a un puesto de trabajo. Es decir, el país intenta ser más electivo con la migración en función de su poder adquisitivo.
En este reportaje, explica los detalles migratorios para evitar la expulsión de territorio europeo.
Tomado de David Placer