Utah evalúa permitir la compra de cerveza junto con pedidos de comida para llevar
Aún se espera el debate legislativo sobre la SB328 y su impacto en la regulación del consumo de alcohol en Utah.
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Redacción Panas en Utah.- La Legislatura de Utah está considerando cambios en las leyes estatales sobre el alcohol, incluyendo la posibilidad de permitir a los consumidores comprar cerveza junto con pedidos de comida para llevar. Esta medida forma parte del proyecto de ley SB328, presentado recientemente y que busca modificar diversas regulaciones en torno a la venta y distribución de bebidas alcohólicas en el estado.
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Si se aprueba la iniciativa, los compradores podrían incluir cerveza en sus pedidos de alimentos en línea y recogerla en zonas designadas para carga en supermercados u otros establecimientos autorizados. Sin embargo, seguirían aplicándose las regulaciones habituales, como la prohibición de vender a menores de edad oa personas visiblemente intoxicadas.
Aumento en los precios del alcohol.
El proyecto de ley también contempla un ligero incremento en el margen de beneficio estatal en la venta de bebidas alcohólicas, pasando del 88,5% al 88,85%. Este ajuste supondría un aumento de algunos centavos por botella y los ingresos adicionales se destinarían a la nueva Cuenta Restringida para la Educación de los Reclusos . Se estima que esta medida generaría aproximadamente 770.000 dólares anuales para financiar programas educativos y de formación profesional en prisiones.
Otras modificaciones a la ley de alcohol
Además de la venta de cerveza en pedidos para llevar y el aumento de precios, la SB328 propone otros cambios en la legislación:
- Permitir que empleados de bares y restaurantes mayores de 21 años puedan verificar la calidad de las bebidas mediante la “prueba de la pajita”, es decir, probando una pequeña cantidad del contenido.
- Eximir a ciertos terrenos estatales de restricciones sobre la distancia mínima entre establecimientos con licencia para vender alcohol y lugares como escuelas, parques o iglesias.
- Restablecer la facultad de la Comisión de Bebidas Alcohólicas del estado para rechazar licencias en función del historial de infracciones del solicitante.
Estos cambios son más limitados en comparación con la reforma de 2024, que flexibilizó la concesión de licencias para bares y restaurantes y prohibió la venta de alcohol con alto grado de concentración.
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Aún se espera el debate legislativo sobre la SB328 y su impacto en la regulación del consumo de alcohol en Utah.
Con información de The Salt Lake Tribune