Esta fue la denuncia que hizo la actriz venezolana Ivette Domínguez sobre el acoso de una presunta secta (+VIDEO)
El caso de Ivette Domínguez pone sobre la mesa un tema sensible que trasciende el ámbito del espectáculo y exige respuestas institucionales claras ante cualquier forma de violencia o intimidación.
Redacción Panas en Utah.- La reconocida actriz venezolana Ivette Domínguez enfrenta una delicada situación tras revelar que recibe amenazas y mensajes de acoso desde diciembre de 2024. Según explicó en un video publicado el 21 de abril en su cuenta de Instagram, los mensajes comenzaron después de su participación en una cuña navideña y provienen de personas que aseguran pertenecer a una “secta”.
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Domínguez afirmó que estos mensajes provienen de distintos números telefónicos y se han intensificado con el paso del tiempo. En sus declaraciones, expresó preocupación por su seguridad y la de su entorno más cercano. “Temo por mi vida, temo por las personas que están a mi lado porque mi único pecado es trabajar decentemente en este país”, dijo visiblemente afectada.
Ante la gravedad de la situación, la actriz presentó una denuncia formal ante el Cuerpo de Investigaciones Científicas Penales y Criminalísticas (CICPC) y solicitó la intervención del fiscal general de la República, Tarek William Saab, para que el caso reciba la atención que merece. Además, compartió capturas de los mensajes recibidos a través de WhatsApp como prueba del acoso sistemático al que ha estado expuesta.
La publicación en redes sociales generó una ola de solidaridad. Colegas del mundo del espectáculo y seguidores se pronunciaron con mensajes de aliento y protección espiritual. La actriz Amanda Gutiérrez comentó: “Te envuelvo en la llama rosa del amor, para que te proteja de todo mal, mi santa”. También se sumaron Hilda Abrahamz, el comediante conocido como La Yubraska, Nacho Huett y otros artistas del medio venezolano.
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La denuncia de Domínguez reabre el debate sobre la seguridad de las figuras públicas y la necesidad de crear mecanismos efectivos para atender casos de acoso y amenazas. Mientras tanto, sus seguidores siguen atentos al desarrollo de la investigación, con la esperanza de que las autoridades actúen con celeridad y garanticen su bienestar.
El caso de Ivette Domínguez pone sobre la mesa un tema sensible que trasciende el ámbito del espectáculo y exige respuestas institucionales claras ante cualquier forma de violencia o intimidación.
Con información de El Diario
