Alerta por sequía en Utah: Cox declara emergencia en 17 condados y pide responsabilidad con el agua
Cox remarcó la necesidad de actuar de inmediato: “La conservación del agua es fundamental para el futuro de Utah. Insto a cada habitante a hacer su parte con conciencia y responsabilidad”.

Redacción Panas en Utah.- El gobernador de Utah, Spencer Cox, activó este jueves una declaración oficial de sequía para 17 de los 29 condados del estado. La medida responde a los bajos niveles de acumulación de nieve en el centro y sur de Utah, situación que compromete la disponibilidad de agua para los próximos meses.
El Comité de Respuesta a la Sequía deberá analizar los efectos que la falta de agua ya está generando en las zonas afectadas y proponer medidas concretas para enfrentar la situación. El gobernador busca una coordinación efectiva entre agencias estatales, municipios y usuarios para actuar con rapidez y mitigar los daños.
Lee también: Venezuela reduce actividad laboral de entes públicos por seis semanas ante sequía
Entre las recomendaciones emitidas, se destaca el llamado a empresas proveedoras de agua y sistemas de riego para que promuevan el uso eficiente del recurso, especialmente en jardines. También se sugiere consultar con la División de Recursos Hídricos sobre posibles planes de acción adaptados a cada región.
Las autoridades locales deberán considerar restricciones hídricas y políticas de conservación durante la temporada de riego. La orden del gobernador pone el foco en el ahorro doméstico: reducir el riego exterior, reparar fugas y rediseñar jardines en zonas donde el césped no resulta esencial.
La declaración de emergencia incluye a condados como Iron, Washington, Sanpete, Uintah y Piute, todos con pronósticos de caudal inferiores al 50 %. En el suroeste, algunos puntos podrían enfrentar un suministro de agua menor al 30 % esta primavera, según los últimos estudios.
Pese a que el promedio de nieve acumulada en el estado se mantuvo cerca de los niveles normales gracias a la región norte, en el centro y sur la situación es crítica. Casi la mitad de Utah atraviesa condiciones de sequía severa o extrema, lo que impacta directamente en la agricultura, el ganado, la fauna y el suministro de agua potable.
Lee también: Lyles, fin a 20 años de sequía
Jordan Clayton, hidrólogo estatal, advirtió que la escorrentía será menor, ya que la poca nieve derretida se infiltrará en el suelo seco en lugar de llegar a los ríos y embalses.
Cox remarcó la necesidad de actuar de inmediato: “La conservación del agua es fundamental para el futuro de Utah. Insto a cada habitante a hacer su parte con conciencia y responsabilidad”.
La declaración tendrá una vigencia inicial de 30 días, con posibilidad de extensión por parte de la Legislatura.
Con información de KSL