Guanare, Portuguesa.- Una joven venezolana murió estrangulada en manos de su ex pareja y luego fue enterrada en zona boscosa en Guanare, estado Portuguesa, al centro- occidente de Venezuela.
El crimen ocurrió aproximadamente a la 1:00 a.m. del pasado lunes 1 de julio en una vivienda ubicada en el sector 2 de la urbanización La Comunidad de Guanare, exactamente frente al liceo, según reseñó el periodista Miguel Villavicencio para el medio Diario Última Hora Digital.
La víctima fue identificada como María Paula Azuaje Amaro, de 22 años de edad, quien se ganaba la vida trabajando como cajera en un abasto de un comerciante de origen asiático y el próximo 13 julio hubiese cumplido 23 años.
Lee también: Nueve policías mexicanos quedaron en prisión por el homicidio de un manifestante
Azuaje Amaro se encontraba durmiendo en su residencia cuando fue sorprendida por su ex pareja sentimental, quien fue identificado como Junior Adrián Pantaleón Guaicara, de 23 años de edad, de oficio obrero y con domicilio en el caserío Moritas, jurisdicción del municipio Papelón.
Minutos después de su llegada al domicilio, el hombre viciado por los celos , discutió con la joven mujer, ya que ella quería terminar la relación. Por lo que Guaicara la atacó, ahorcándola hasta causarle la muerte.
Tras asesinarla, el hombre sacó el cadáver de madrugada en su moto por la Troncal 05 (carretera vieja Guanare – Barinas) hasta una zona boscosa, en una finca ubicada en el caserío Las Tinajitas, jurisdicción del municipio San Genaro de Boconoíto, donde la sepultó.
Lee también: Detenido en España un condenado por dos homicidios que se fugó de la cárcel en Venezuela (+VIDEO)
Al mismo tiempo, incendió su moto y las prendas de vestir de la víctima y horas después regresó a la ciudad de Guanare como pasajero a bordo de un transporte público.
Finalmente, la madrugada del miércoles 3 de julio, Pantaleón Guaicara acudió ante el Cicpc, Delegación Municipal Guanare, para participar sobre la desaparición de “su novia”.
Al ser abordado por los funcionarios y mostrar nerviosismo, terminó confesando el crimen y contó donde enterró a la víctima.
Con información de Miguel Villavicencio
